Según datos extraídos por Chinchilla (1987), en la época precolombina el territorio que actualmente corresponde al cantón de Matina, conformó parte de la provincia de considerable extensión y población indígena, denominada Pococí, situada entre las provincias de Suerre y Tariaca, la cual estaba constituida por varios pueblos.
Desde mediados del siglo XVI existió una ermita en la región. Hacia 1 720 el presbítero don Manuel López Conejo construyó la primera iglesia, que consistió en un simple galerón de horcones techado de paja, con un cajón de madera por altar. En 1 734 se estableció una parroquia dedicada a la Inmaculada Concepción. Durante el arzobispado de Monseñor Carlos Humberto Rodríguez Quirós, cuarto arzobispo de Costa Rica, en el año de 1 968 se erigió la Parroquia a Nuestra Señora de Guadalupe; la cual es sufragánea de la Diócesis de Limón de la Provincia Eclesiástica de Costa Rica.
En 1 564 don Juan Vasquéz de Coronado, al regreso de su expedición a la parte sureste de la cordillera de Talamanca, pasó próximo al litoral del presente cantón hasta la desembocadura del río Matina y de ahí aguas arriba a la unión con el río Duchí (hoy Chirripó), para continuar rumbo a Cartago. Don Perafán de Rivera en 1 570, siguió similar ruta.
El gobernador de la provincia Don Gregorio de Sandoval, en 1 637 estableció el Puerto de Matina, en la desembocadura de igual nombre, en el Mar del Norte (hoy Caribe); quien a la vez mejoró el camino a Cartago.
A partir de la segunda mitad del siglo XVII entre 1 682-1 691 se inició el cultivo de cacao en la zona, que fue el primer producto exportado por la Provincia; actividad que estuvo ligada a los vecinos pudientes de la ciudad de Cartago, siendo 44 hacendados quienes financiaron su explotación. Tenían árboles en producción y nuevos sin frutar, haciendo uso gratuito de la mano de obra aborigen, contaban con 78.500 árboles y en 1 787 con 353 254. Este producto se exportaba a Nicaragua, Colombia, Las Antillas y a España. Además de este, había otros productos tales como platanales y algodón.
Esto motivó a que Matina adquiriese gran importancia y fuese centro de contrabando. Era tal movimiento comercial de dicho sitio, que se estableció en 1 643 y 1 666, diferentes impuestos por cada buque que llegara al puerto. Desde finales del siglo XVII los zambos mosquitos incursionaron en forma violenta en las plantaciones de cacao de Matina, para despojar a los cultivadores en el momento de la cosecha, en junio y diciembre. Los zambos mosquitos tuvieron su origen en el naufragio de un barco negrero frente a la costa nicaragüense. Del cruce de negros e indios nació la etnia que devastó durante muchos años nuestra costa del Atlántico. La actividad empezó a languidecer y ya por el año de 1 803 estaba completamente abandonado, como lo atestigua el gobernador Vásquez de Telles en sus informes oficiales.
En el año 1 676, siendo Gobernador don Francisco Sáenz Vázquez, 800 piratas invadieron Matina, más fueron rechazados, teniendo más de 200 bajas. Luego para los años 1 681 y 1 702 los piratas invaden el Valle de Matina, saqueándolo y tomando prisioneros; pero luego son rechazados por el Gobernador de Cartago, Juan Francisco Sáenz V.
En abril de 1 742 se construyó el Fuerte de San Fernando, a unos ochocientos metros aguas arriba de la desembocadura del río Matina, en su margen este; que fue asaltado y quemado por los piratas ingleses en agosto de 1 747. Este fue el último baluarte construido por los españoles en el litoral Caribe.
El diputado de la Provincia de Costa Rica, ante la Corte de Cádiz, España, el presbítero don Florencio del Castillo; logró que estás promulgaran el 1 de diciembre de 1 811, un Real Decreto deponiendo que el puerto de Matina quedaba habilitado para el comercio exterior.
En la Ley N° 86 de 4 de abril de 1 826, en el gobierno de nuestro primer Jefe de Estado don Juan Mora Fernández, se dispuso donar terrenos no sólo en la nueva población de Matina, sino también en áreas aledañas. En la primera, solares para vivienda de los pobladores y en las otras para dedicarlas a la agricultura y ganadería. Así también se ordenó establecer una Municipalidad compuesta por un alcalde, un regidor y un procurador; y la construcción de una ermita financiada por los vecinos del lugar.
En la Ley N° 22 del 4 de noviembre de 1 862, sobre Ordenanzas Municipales, Matina constituyó un pueblo del cantón segundo, Paraíso de la provincia de Cartago. En la ley sobre división territorial para efectos administrativos Nº 20 del 18 de octubre de 1 915, el barrio Matina conformó parte del distrito segundo del cantón primero Limón de la provincia con este último nombre. En el gobierno de don José Joaquín Trejos Fernández según Ley N°4 344 del 24 de junio de 1 969, se le otorgó el título de villa al barrio Matina, cabecera del cantón creado en esa oportunidad, por iniciativa en un principio ante proyecto presentado por el diputado Carlos Eduardo Neil Neil el 7 de febrero de 1 968.
Los motivos que expuso el diputado señalan que el distrito de Matina era el más antiguo de la provincia de Limón y que por falta de interés de los gobiernos no había podido desarrollarse en forma debida. Además, el distrito de Matina contaba con la población suficiente para erigirse en Cantón.
El mencionado proyecto fue presentado a la asamblea el 9 de febrero de 1 968 y se pasó inmediatamente a la comisión Permanente de Asuntos de Gobierno y Administración quien emitió su dictamen de mayoría afirmativo.
Se crea el cantón de Matina a partir del 2 de febrero de 1 970, con los distritos de Matina y Bataan y se fijan los límites.
Por decreto Nº 2078-G del 26 de noviembre de 1 971, se crea el Distrito tercero Carrandí con cabecera en Villa Estrada. En la ley Nº 4 574 de mayo de 1 970 se promulgó el Código Municipal que en su artículo tercero, le confirió a la villa de Matina la categoría de Ciudad por ser cabecera de cantón.
El 9 de agosto de 1 970 se llevó a cabo la primera sesión del Concejo de Matina, integrado por los regidores propietarios, señores Wilfred Jackson Bell, presidente; Misael Rojas Montero, vicepresidente; y Miguel Barquero Cavaría. El Ejecutivo Municipal fue don Broomfield Murray Wilesley y el Secretario Municipal Eloy Cameron Wilfred.
La siembra de banano en la región inició a finales del siglo XIX por parte de don Minor Keith; actividad que se incrementó en un corto plazo y en el primer tercio del siglo XX, por la producción a gran escala efectuada por la United Fruit Company, empresa establecida en 1 899 por el señor Keith, en asocio con capital extranjero. Este cultivo se vio afectado en la década de los años treinta del siglo XX, debido a las enfermedades de las plantas y el agotamiento de los suelos, lo cual motivó a la citada empresa a trasladar sus intereses y producción al Pacífico sureste del país.
La construcción del ferrocarril fue ampliando la población de lo que actualmente se habita desde Saborío hasta Madre de Dios, pues a los trabajadores, al no podérseles pagar el salario por su trabajo, la compañía constructora de la misma, optó por entregarles solares a ambos lados de la vía férrea como sustitución del dinero.
La siembra y explotación del abacá, fibra orgánica utilizada en sacos, mecates y otros usos, comenzó en el año 1 943 con la introducción de inversionistas filipinos. Esto permitió una expansión de la población dando origen a pueblos como: Manila, La Perla, Cultivez, Sahara, B-line, Davao, Bataan entre otros; con gran desarrollo de infraestructura como tren vía, casa, salones comunales, acueductos entre otras.
La actividad de la explotación del abacá terminó con la salida al mercado mundial de la fibra de polietileno que era más resistente y menos costo de producción, por lo que la compañía fue dejando todo en abandono a mediados de la década de los cincuenta.
La siembra del cacao en la década de los años cuarenta se extendió como fuente de vida y actividad socioeconómica de las comunidades como Zent, Boston, Cuba Creek, las que antes eran zonas bananeras; pero al surgir las enfermedades como: mal de Panamá, sigatoka y moco, la compañía United Fruit Company lo sustituyó en un intento por mantener su actividad económica.
En 1 908 se estableció la escuela, durante la primera administración de don Cleto Gonzáles Víquez; la cual en ese momento se denomina Escuela Matina. El Colegio Técnico Profesional de Bataan inició sus actividades docentes en 1 974, en el segundo gobierno de don José Figueres Ferrer.